dimecres, 20 d’octubre del 2010

EN TREN D'ANADA I TORNADA...


(més si clikeu damunt es llibre)

"El tren de vía estrecha que partía despacio desde Vigàta-Canelle a Castellovitrano, último pueblo servido por la línea, tardaba más o menos medio día en llegar a destino, dado que las paradas previstas eran casi veinte, sin contar las imprevistas debidas a atravesamientos de rebaños de cabras y ovejas, o alguna vaca a la que se le ocurría dormirse entre los rieles [...] Cada mañana a las seis partían simultáneamente, uno de Vigàta y el otro de Castellovitrano y, después de cruzarse en la estación de Sicudiana, se presentaban a la una menos diez en sus respectivas llegadas. A las tres de la tarde cada tren retomaba el camino de regreso hacia el sitio de donde había partido porla mañana [...] Los pasajeros eran casi siempre los mismos, comerciantes, empleados, maestros y maestras, estudiantes y parientes de presos [...] También había aldeanos y aldeanas que cogían el tren con sacos y cestos para ir a vender huevos, requesón, queso y también algunas gallinas en los pueblos más grandes. Todos se conocían entre sí y todos conocían a los maquinistas y a los jefes de tren , que hacían también de revisores [...] Con la excepción de los estudiantes, que repasaban las lecciones, y de las maestras y maestros que tenían el periódico, los demás pasajeros no eran gente de lectura y pasaban el tiempo de viaje charlando o jugando a las cartas: escoba, tres sietes y brisca." (pág. 7-9)